El Ictus es uno de los problemas de salud más importantes en nuestro país ya que junto a la enfermedad cardiovascular y el cáncer son las primeras causas de muerte. El ictus afecta mayoritariamente a personas mayores de 65 años siendo la principal causa de discapacidad grave en adultos.
El objetivo de este artículo no es informaros sobre dicha enfermedad sino de la importancia del ejercicio como tratamiento y dar a conocer mi trabajo como Entrenador Personal. Una de mis últimas clientas, viene recomendada por su médico ya que la Ciencia continúa demostrando que el ejercicio físico junto al resto de tratamientos específicos consiguen reducir el grado de dependencia y el riesgo de sufrirlo de nuevo.
Los entrenamientos que realizo con esta mujer están totalmente adaptados a sus capacidades y a su resistencia, dado que la progresión que debe seguir debe ser gradual y siempre evaluando su estado general antes de comenzar cada sesión. Todos los días realizamos ejercicio cardiovascular en función de su percepción de esfuerzo (6/10) y trabajo de fuerza funcional, siempre y cuando las sensaciones que tenga sean positivas. Otro de los aspectos fundamentales a trabajar es la coordinación y estabilidad y terminar cada sesión con una recuperación activa que consiga hacer sentir bien a la paciente. La planificación que he realizado para ella es realizar dos días a la semana entrenamientos como el expuesto anterior, dos días de ejercicio en piscina y salir a caminar diariamente como un hábito diario más.
Después de seis meses entrenando con ella, los resultados son muy positivos tanto a nivel físico como funcional; hemos conseguimos perder peso, reducir su colesterol y tener más autonomía en general. Hasta el momento, todo el trabajo realizado con ella ha sido muy satisfactorio tanto para ella como paciente como para mí como entrenador personal especializado en Salud. Si estás viviendo un caso parecido y quieres compartir tu información o simplemente quieres conocer mi manera de trabajar, no lo dudes, soy tu Entrenador personal.
